El excitador es uno de los principales elementos que permiten que esta nueva técnica sea considerada tan especial. El excitador cumple funciones similares a los famosos “pajaritos” que se montan en cadena y que se utilizan para llamar la atención de los pelágicos con sus estridencias sobre la superficie del agua.
El sistema del Green Stick necesita llamar la atención y atraer a los atunes, consiguiéndolo desde notables distancias o profundidades, para que una vez se acercan vean los señuelos que chapotean y nadan en sus cercanías.
Por pura lógica, para poder cumplir con todas estas funciones y hacerlas efectivas, el excitador debe tener unas medidas y un peso excepcional, de lo contrario el aparejo no podría mostrarse como un dispositivo de pesca seguro y práctico.
La presión y tensión que ejerce este excitador contra el agua y el oleaje es enorme, formando unas turbulencias y ruido exagerados, creando además una mancha de espuma que puede ser visible a distancias y profundidades importantes, siendo el primer atractivo para los atunes que se encuentran a grandes distancias y que se acercarán sin dudar.